En Dok Hand, respaldamos nuestras afirmaciones sobre la efectividad de nuestros colchones regulables con datos concretos provenientes de estudios científicos y ensayos clínicos.
Estas investigaciones y estudios han sido fundamentales para diseñar nuestros colchones y ofrecer soluciones adaptadas a las necesidades de cada persona.
A continuación, resumimos algunos de los hallazgos más relevantes:
Investigaciones han demostrado que los colchones planos pueden causar alteraciones biomecánicas en algunas personas. Sin embargo, los colchones con zonas adaptadas a la forma de los hombros y caderas contribuyen a mantener la postura fisiológica de la columna durante el sueño, previniendo problemas musculoesqueléticos relacionados con el descanso.
Estudios han mostrado que incorporar un soporte lumbar en un colchón puede favorecer una transición adecuada de la presión de contacto de la región pélvica a la lumbar. Esto limita potencialmente las fuerzas de compresión y cizallamiento desfavorables que actúan sobre la columna lumbar, beneficiando tanto a pacientes sanos como a aquellos con dolor lumbar.
Ensayos clínicos han evidenciado que los pacientes diagnosticados con dolor musculoesquelético, ya sea lumbar o de hombro, experimentaron una mejoría sintomática al utilizar colchones adaptados a su morfología y preferencias de postura para dormir. Esto destaca la importancia de la alineación de la columna y el buen soporte corporal, considerados en la configuración del núcleo biomecánico de los colchones Dok Hand.
Tres estudios independientes han demostrado que durante el sueño se producen condiciones adecuadas para la rehidratación de los discos intervertebrales. Mantener una columna alineada al dormir de lado o respetar las curvaturas fisiológicas al dormir boca arriba, junto con un descanso de 7 a 9 horas y una hidratación adecuada durante el día, son factores cruciales para este proceso.
Investigaciones han mostrado que optimizar la distribución del peso corporal en el colchón y reducir la presión sobre la piel contribuye a aumentar la calidad del sueño.
Además, cuando se logra una distribución adecuada del peso, el riesgo de formación de úlceras por presión se reduce e incluso desaparece.
En Dok Hand, hemos logrado que nuestros colchones reduzcan la presión sobre la piel al mínimo posible, ayudando a nuestros clientes a descansar mejor.
Además de estos estudios científicos y ensayos clínicos, en Dok Hand colaboramos estrechamente con médicos expertos que conocen las investigaciones mencionadas y han probado nuestros colchones en la práctica.
En nuestra sección Dormir sin dolor, estos profesionales médicos explican cómo regular los colchones para abordar condiciones específicas, como hombros anchos o trocanterismo.
Analizan los condicionantes anatómicos relevantes para cada zona y proporcionan pautas sobre cómo ajustar gradualmente el colchón para adaptarlo a las necesidades individuales.
Estas recomendaciones se basan en el objetivo de alinear la columna y reducir la presión sobre las áreas problemáticas.
Por ejemplo, en el artículo sobre hombros anchos se detallan los condicionantes anatómicos de la cintura escapular y cómo influyen en el sueño.
Se explica que tener hombros anchos no es una patología, sino una condición anatómica que, al dormir de lado en un colchón convencional, puede causar dolor, similar a una tendinitis.
Se brinda orientación sobre cómo realizar ajustes graduales en el colchón, retirando capas del regulador de hombros en intervalos de tiempo para habituarse.
Este proceso permite adaptar gradualmente el colchón al perfil de la silueta de la persona, reduciendo la presión sobre el hombro y alineando progresivamente la columna.
Es importante hacer estos ajustes de forma gradual debido al estiramiento de la musculatura en el otro lado de la espalda, lo que podría causar dolores musculares al permanecer estirada durante horas mientras se duerme.
En resumen, la ciencia respalda los beneficios de los colchones regulables Dok hand.
Estos colchones han sido diseñados teniendo en cuenta los estudios sobre biomecánica, la importancia de la alineación de la columna, la rehidratación de los discos intervertebrales, la reducción de la presión y la mejora de la calidad del sueño.
Nuestro objetivo es proporcionar soluciones adaptadas y respaldadas por la ciencia para ayudar a las personas a dormir sin dolor y disfrutar de una mejor calidad de vida.
En los siguientes enlaces puedes acceder a las publicaciones citadas.
En este primer estudio, plantean la necesidad de realizar colchones cada vez más personalizados. La idea es que se adapten a la biomecánica del cuerpo, para dormir para prevenir problemas musculoesqueléticos relacionados con el sueño.
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC6348954/
Aquí hablan sobre como la personalización de los colchones con diferente elasticidad zonal, contribuye a mantener la postura fisiológica de la columna durante el sueño
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC3265433/
En este estudio sobre almohadas, muestran que aquellas que brindan soporte al cuello mejoran la calidad del sueño. Al tener un mejor soporte el cuello se evita la fatiga de cabeza, fatiga de cuello y el dolor de hombro. Este es el efecto que buscamos replicar en nuestros colchones a través del regulador dorsal.
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/31906363/
En este estudio (también sobre almohadas) nos explican que unos de los parámetros más importantes a tener en cuenta es la alineación de la columna y el buen soporte corporal. Ambos parámetros se toman en cuenta para configurar el núcleo biomecánico en nuestros colchones.
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC8544534/
Aquí comentan sobre los beneficios de incorporar un soporte lumbar a un colchón a nivel biomecánico en pacientes sanos y aquellos con dolor lumbar. Un soporte lumbar favorece una transición de la presión de contacto de la región pélvica a la lumbar, que podría limitar potencialmente las fuerzas de compresión y cizallamiento desfavorables que actúan sobre la columna lumbar.
Un estudio ya mencionado anteriormente que habla sobre la inclusión de soportes lumbares a los colchones para prevenir lumbalgias
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC1840018/
Aquí se evidencia como los pacientes diagnosticados con dolor musculoesquelético (lumbar o de hombro) conseguían una mejoría sintomática al usar colchones más adaptables a ellos y sus posturas preferidas para dormir.
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/20579971/
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC2697581/
Aquí básicamente nos hablan sobre la ventaja de un colchón de firmeza moderada, sobre uno de alta firmeza en el alivio de dolores de espalda
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/books/NBK263374/
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/14630439/
En este estudio se evidencia que la firmeza es un dato importante para aliviar los dolores musculo esqueléticos: (hombro, cadera, espalda y cuello) ellos sugieren la firmeza media.
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC4688575/
En esta serie de artículos nos expresan la importancia del sueño y el reposo en cama para la rehidratación de los discos intervertebrales
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/27651134/
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/26350949/
Esta revisión habla sobre la relación entre el colchón y los dolores de espalda y las recomendaciones que aparecen en diferentes guías internacionales
Este articulo expresa como mejorar la distribución de la presión en horas nocturnas puede optimizar la calidad del sueño
https://journals.plos.org/plosone/article?id=10.1371/journal.pone.0099969
Aquí nos hablan sobre la utilidad que puede tener un colchón en la prevención de ulceras por presión. Esto viene determinado por la capacidad que tenga el colchón para reducir la presión sobre las áreas declive
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/23074524/
De nuevo, tenemos evidencia de que según el material con el que se elabore un colchón se puede reducir la presión sobre las áreas declives al dormir
Este estudio nos habla sobre la importancia de la firmeza del colchón y más aún que pueda ser regulable por el usuario
Aquí nos plantean que una temperatura media mejora el sueño