Para configurar el regulador biomecánico empieza por abrir el colchón.

Quita las capas superiores y deja a la vista el regulador (si es un colchón individual) o los dos reguladores (si es un colchón para parejas)
Debajo izquierda: el colchón con los higienizadores (Explicamos su uso más adelante) Derecha: vista de los reguladores biomecánicos sin configurar.

El dispositivo está formado por dos reguladores dorsal y lumbar y el distanciador. Cada regulador tiene cinco capas que puedes quitar o poner, para adaptar el colchón a la forma de tus hombros y caderas.
El distanciador está formado por un bloque y 5 tiras. Tanto el bloque como las 5 tiras puedes ponerlas entre ambos reguladores o a continuación del regulador lumbar.
De esta manera puedes separarlos o juntarlos para adaptarlos a tu anatomía.

A continuación quita las tres capas superiores de ambos reguladores.
Debajo izquierda el regulador biomecánico con todas las capas. Derecha se han quitado tres capas de los reguladores dorsal y lumbar.

Elige tu lado de la cama (en el que duermes) Lo siguiente, es ajustar la distancia entre los reguladores, para que coincidan con el centro de tus hombros y caderas.
Es muy fácil y si te ayuda alguien se tarda menos de un minuto. Se hace en tres pasos:
- Ponte con los brazos cruzados como en la fotografía.

2. Mantén la postura. Tu ayudante debe medir la distancia entre el centro del hombro y el centro de la cadera.

3. Junta o separa el regulador lumbar hasta que el centro de ambos reguladores quede aproximadamente a la misma medida.

Esto se hace mediante el distanciador. El objetivo es adaptarlo a tus medidas.

En caso de duda túmbate de lado directamente sobre el regulador. Enseguida notarás si estás a gusto o tu cuerpo te pide juntarlos o separarlos.

¡Ya está! No es necesaria mucha precisión, porque tiene tolerancia.
Una vez que tengas los reguladores a la distancia adecuada, te recomendamos que vuelvas a poner las capas 2 y 3 de cada uno y comiences a utilizar el colchón así las primeras noches.
Recuerda, es importante:
- Que los reguladores queden a la distancia adecuada.
- Que las primeras noches duermas con todas sus capas excepto la primera.
Debajo: vuelve a montar el colchón. Pon lo primero el higienizador y a continuación las capas de Air.

Termina de poner el Air, cierra el colchón y ¡listo para usar!

Después vas poniendo o quitando capas de los reguladores hasta que encuentres la combinación en la que te sientes más a gusto.
Te recomendamos que hagas cambios lentos, progresivos y que duermas varias noches en cada configuración.
El sentido común y observar lo que nota tu cuerpo te indicaran con que regulación estás mejor.
Lo habitual es que una vez regulado no necesites ajustarlo más, pero siempre podrás hacerlo si surge la necesidad.
