Actualizado 30/12/22  Por Dra. Lisbeth Dentale y Dok hand

¿Sufres dolor de espalda en la cama? ¿Al acostarte o al levantarte el dolor es peor? ¿Te tienes que levantar sin haber descansado lo suficiente porque no aguantas el dolor en la cama? No te angusties, no eres la única persona que lo padece.

Son muchas las causas que pueden producir este dolor. Un equipo de descanso en mal estado, las lesiones, la edad, no tomar la posición correcta al dormir o no descansar lo suficiente.

Pero, todo tiene solución. Vamos a revisar los avances técnicos y estudios científicos que mejores soluciones aportan para resolver este problema.

Tiempo de lectura aproximado: 6 minutos.

 Dolor de espalda en la cama

Si revisas las estadísticas de morbilidad mundial, podrás darte cuenta de que aproximadamente un 80% de la población sufre de dolor de espalda. Y, aunque no lo creas, más del 90% de los afectados se quejan de lo mismo: que sufren de dolor de espalda en la cama.

Antes de nada, si el temor a padecer algo malo no te deja vivir tranquilo, lo mejor será que acudas al médico.

Te hará las pruebas necesarias, para descartar las enfermedades que pudieran generarte ese dolor.

Estas enfermedades pueden ser: desde problemas de la columna cervical o lumbar (como las hernias y artrodesis), desgaste o afectación de los hombros o incluso, hasta afectación de otros órganos diferentes a la espalda.

Pero habitualmente la causa suele ser mucho más simple: tú espalda te está pidiendo ayuda. Para solucionarlo, hay que identificar cual es el problema que causa tu dolor a la hora de dormir.

Dolor de espalda intenso al acostarte

¿El solo pensar en irte a la cama te causa vértigo? ¿Tu dolor empeora después de estar un rato acostado? ¿Interrumpes tu sueño por causa de dolores de espalda? Entonces padeces el clásico dolor de espalda al dormir o dolor lumbar al dormir.

Esto es muy común en quienes sufren de algún dolor lumbar como las hernias y artrodesis. Cuando tienes estas enfermedades, durante una crisis dolorosa, las posiciones estáticas, como estar acostado, pueden ser intolerables.

La causa de este dolor tan agudo es que, al acostarte, tu columna vertebral pierde su forma natural para adaptarse al colchón. Como consecuencia, tus vertebras adoptan una postura forzada y presionan los nervios de la columna causando el dolor.

Si es tu caso y no quieres cambiar de colchón, trata de cambiar de postura con frecuencia o haz descansos más cortos. Incluso, hay pacientes que refieren alivio al dormir boca abajo.

Pero, aunque sufras estas patologías, no tienes por qué estar condenado a padecer dolor lumbar en la cama toda la vida.

La solución es un colchón regulable. Este colchón tiene un sistema para graduar cuanto se hunden tus hombros y caderas en él.

Gracias a esto, se logra alinear perfectamente las vertebras, eliminando la presión sobre los discos intervertebrales y los nervios afectados.

De esta manera, se reduce considerablemente o incluso desaparece el dolor.

Dolor de espalda al levantarte

Muchas son las personas que, como tú, amanecen con el cuerpo rígido cada mañana. A quienes el dolor de espalda o dolor lumbar al despertarse les impide incluso enderezarse.

A menos que sufras de artrosis o artritis esto no debería suceder. Así que, si este es tu problema, cuanto antes, debes revisar tu equipo de descanso.

La rigidez de la espalda y el dolor intolerable al levantarse o enderezarse, es la fiel representación de tensión muscular. Tu colchón mantiene a tu columna en posiciones inadecuadas y los músculos se contracturan tratando de corregir la postura.

Eso explica porque, con el pasar del día, al mejorar la postura, caminar o hacer estiramientos mejora el dolor

 Dolor de espalda por culpa del equipo de descanso

La probabilidad de que tu equipo de descanso sea el culpable de tu dolor de espalda, es la más alta. Aunque tu somier, colchón o almohada no se estropean de un momento a otro, si pueden dejar de proporcionarte el soporte adecuado.

La consecuencia de un mal soporte mientras duermes, es que tus músculos se tensan en exceso, lo que te causa dolor. Las molestias hacen que duermas menos y esto agrava los síntomas, ya que el mal dormir es la causa más importante del dolor.

Este es un círculo vicioso que sin duda debes cortar cuanto antes. Para ello:

Revisa tu base o somier: no debe estar deformada o combada

Las bases o somieres -especialmente cuando las usan niños o parejas muy activas en la cama- se deforman.

Esto es más frecuente de lo que imaginas y puede ser la causa de tus molestias. Además, una base deformada, con el tiempo, estropeará tu colchón.

La deformación más frecuente es que se combe. Es decir que se hunda el centro y quede más bajo que los extremos.

Así que, revísala. Si tienes dudas sobre si está deformada o no, quita el colchón, dale la vuelta (a la base) y apóyala en un suelo plano. Si tiene zonas que no apoyan en el suelo, es que está deformada.

Si eres bastante manitas, puedes enderezarla. Si no, cámbiala.

Una forma excelente de que esto no vuelva a suceder es emplear bases que además de las patas de los extremos tienen patas centrales.

Porque, al fin y al cabo, el centro es la parte que mayor esfuerzo soporta y que antes se deforma.

Comprueba si el colchón mantiene tu espalda recta

Puedes hacerlo fácilmente con la ayuda de tu pareja. La persona con dolor se tumba de lado en el colchón. Su pareja, mirando su espalda puede ver fácilmente si su columna permanece alineada.

Dormir con la espalda combada suele producir dolores en hernias y pinzamientos tanto en la espalda como el cuello.

Además, suele ser un indicador bastante preciso de que el colchón es demasiado firme para esa persona.

La consecuencia es una presión excesiva en hombros y caderas, lo que causa dolor en estas partes del cuerpo.

Si este es el problema y tu colchón está en buenas condiciones, puedes reducir su firmeza añadiendo un Topper viscolástico. Pero si tu colchón es excesivamente blando o si está deformado, cámbialo, porque en esos casos no tiene solución.

Comprueba la almohada

La almohada no solo guarda una relación directa con muchos los dolores de cuello, sino que llega a influir en dolores de espalda. Incluso, llega a repercutir en dolores lumbares.

Desafortunadamente, hay muy pocos estudios científicos sobre la influencia de la almohada en el dolor de cuello y espalda. No podemos dar grandes consejos sobre la almohada por esta razón.

Lo que se sabe con certeza, es que dormir sin almohada o hacerlo con una inadecuada, agrava el dolor.

Durmiendo de lado, nuestros clientes obtienen el mejor resultado con almohadas adaptadas a su altura de hombros. Lo principal, es que soporten el peso de la cabeza sin transmitir tensiones a la columna vertebral.

Vista de frente, la alineación de los ojos es un buen indicador de si la altura de la almohada es la correcta o no.

Es decir, los ojos deben formar una línea casi vertical, ligeramente inclinada hacia los hombros. En estas imágenes se puede ver.

Alturas almohada, alta, correcta y baja

Es muy importante tener en cuenta que, en la altura ideal de la almohada, además de las dimensiones corporales, depende de la firmeza del colchón.

Para la misma persona, en un colchón firme el hombro se hunde menos y por ello necesita una almohada más alta. En un colchón más blando, el hombro se hundirá más y una almohada más baja proporcionará el soporte perfecto.

Nuestra recomendación es que teniendo en cuenta estas explicaciones observes que resultado te da la almohada.

¿Sirve cualquier colchón para el dolor de espalda?

Si tu dolor está causado porque duermes sobre un equipo deteriorado, solo con sustituir la pieza estropeada por otra en buen estado, solucionarás el problema.

En general, la mayoría de las personas que en la cama padecen dolores de espalda moderados, solucionan el problema con un colchón nuevo que sea adaptable.

No obstante, cómo a partir de los 40 años estos dolores no suelen mejorar sino empeorar, un Colchón Regulable Dok Hand será siempre más eficaz.

Y si tu problema es más grave, ya llevas varios colchones de buena calidad cambiados y ninguno ha solucionado tu problema, es muy poco probable que otro colchón plano convencional lo solucione.

La mejor y probablemente única opción que resuelva tu problema es un Colchón Regulable Dok Hand. Es un colchón completamente diferente a los demás, con regulación de forma, firmeza y temperatura.

Su diseño y forma de funcionar están basados en numerosas investigaciones médicas y ensayos clínicos para combatir el dolor de espalda en la cama.

 El Colchón Regulable Dok Hand

Las ventajas que aporta este colchón, respecto a los demás colchones, son sus sistemas de regulación de forma, firmeza y temperatura.

La regulación de forma se hace principalmente en hombros y caderas. Consiste en quitar capas de los reguladores dorsal y lumbar para amoldar el colchón a la forma de estas partes salientes del cuerpo.

Esto tiene dos objetivos principales: Primero, evitar que al dormir el cuerpo adopte posiciones forzadas que causan dolor. Principalmente aplanamiento o combadura de la columna vertebral.

Y, en segundo lugar, reducir la presión sobre las articulaciones de hombros y caderas para acomodarlas mejor, evitando dolor y proporcionando mayor confort.

Es decir, crear un soporte corporal ergonómico que mantenga la alineación y curvaturas naturales de la columna vertebral mientras duermes. Y a la vez, distribuyendo mejor el peso corporal.

Otra de las aplicaciones de la regulación del colchón, es reducir la presión sobre las zonas que presenten una lesión muscular, tendinosa o articular.

En casos de bursitis, las mediciones de presión han demostrado que con este colchón es posible reducirla un 80 % sobre el área afectada, con lo que el dolor desaparece al poco tiempo.

La Guía de Uso del Colchón Regulable

Pasamos al menos un tercio del día durmiendo. Por eso, resulta comprensible que la postura en la que dormimos agrave los síndromes dolorosos.

Si todo nuestro peso cae sobre una lesión muscular, tendinosa o articular durante 7 a 8 horas, aumentará el dolor en ese sitio. Pero también puede afectarse el lado contrario.

El cuerpo, al sentir la incomodidad de un lado tratará de compensar la postura. Los músculos se contraen tratando de estabilizar el cuerpo y duelen.

La Guía de Uso del Colchón Regulable recoge experiencias de médicos que duermen en colchones regulables.

En ella explican cómo se debe realizar la regulación del colchón para minimizar o evitar dolores concretos: de hombros, caderas, por hernias etc. en la cama.

Tienen en cuenta los condicionantes anatómicos y patologías, que influyen en estos dolores que puedes sentir al estar acostado mientras duermes.

Por ejemplo, una persona con hombros anchos o tendinitis es mucho más propensa a tener dolor en el hombro al dormir de lado, por lo que necesita una regulación adaptada a su caso específico.

Es por tanto una guía muy útil para cualquier persona que duerme mal por estos dolores.

Comprar un colchón regulable es una inversión que vale la pena, tomando en cuenta la mejora de calidad de vida y confort que vas a obtener.

Opiniones Colchones Regulables

 Causas del dolor de espalda en la cama

Existen muchas causas que justifican el dolor de espalda en la cama. Hay además algunos factores relacionados con la forma en que dormimos que lo favorecen.

  • El primero es la cantidad de horas que estamos en la cama, unas 7 a 8 de promedio.
  • Nuestro cuerpo tiene partes salientes, hombros, caderas y curvaturas en la columna (lordosis) mientras que los colchones son planos.
  • Es lógico que si pasamos ese tiempo con el cuerpo deformado en algunos casos esto termine en dolor

Causas del dolor de hombros en la cama

El dolor de hombro puede ser generado por patologías de todo tipo:

  • Las afecciones del hígado o diafragma pueden reflejarse en el hombro.
  • Los problemas con la articulación del hombro son muy dolorosos.
  • Las tendinitis del deltoides, bíceps o tríceps también generan dolor.

El dormir sobre el hombro doloroso aumenta los síntomas, porque además de sobrecargarlo de peso la postura que se adopta es poco anatómica.

Causas del dolor por hernias y pinzamientos en la cama

La protrusión de cualquiera de los discos vertebrales, en la región dorsal, cervical o lumbar genera el pinzamiento de los nervios que de allí se originan.

Pero, también puede haber pinzamiento nervioso en las articulaciones o en otros espacios por donde transcurra el mismo.

Un ejemplo claro de esto es:

  • La compresión del obturados por la contractura del psoas.
  • El síndrome del túnel carpiano por edema de los tendones flexores de los dedos o por engrosamiento del ligamento.
  • Los dolores braquiales por la compresión del nervio axilar.
  • El pinzamiento del nervio cubital por el olecranon, en la articulación del codo.

Son incontables los sitios donde puede afectarse el nervio.

A la hora de dormir es importante tomar una buena postura. Esta debe garantizar que el sitio afectado estará relajado, en posición anatómica y sin compresiones extra.

Dormir con la mano bajo la cabeza resulta una tortura para quien sufre del síndrome del túnel carpiano, por ejemplo.

Causas del dolor lumbar en la cama

Poner en una lista las causas de dolor lumbar nos llevaría un par de páginas, por lo que vamos a reflejar las más frecuentes.

El dolor lumbar en la cama puede ser causado por:

Problemas musculares como fibromialgia, contracturas, desgarros o tendinitis.

Por lesiones vertebrales como fracturas, artrodesis, escoliosis, artrosis, hernias, entre otros.

Problemas de otros órganos que se reflejan en la columna lumbar como pielonefritis, metástasis, hipertrofia protática.

La postura a adoptar durante el sueño para evitar que aumente el dolor va a depender de la patología. Debes seguir los mismos principios que hemos comentado hasta ahora, evitando sobre cargar la zona y causar tensión muscular.

Ciática

La ciática es una radiculopatía que aparece al estar comprimido alguno de los nervios ciáticos. Esta estructura se forma en la columna lumbar, y tras la unión de varios nervios discurre por la nalga hacia el miembro inferior.

Cuando se encuentra inflamado es normal sentir dolor desde la zona lumbar hacia un miembro. Este dolor puede aumentar en la cama, en especial si la postura es boca arriba, por compresión excesiva del nervio.

 Ejercicios para combatir el dolor de espalda en la cama

Hacer ejercicio ayuda a evitar el dolor de espalda

El ejercicio es el mejor hábito que podemos tener los seres humanos. Es el remedio para casi cualquier afección física y mental, la liberación de endorfinas relaja la mente de cualquier angustia y estrés.

Pero ¿cuánto y que ejercicio es saludable? A menos que seas un deportista profesional de alto rendimiento, puedes estar seguro de que no sufrirás lesiones ni desgaste por el ejercicio. Puedes empezar con una caminata y poco a poco tu cuerpo se adaptará y podrás hacer más cosas.

Con tan solo un poco de ejercicio diario podrás activar y relajar tus músculos. Así mismo, estarás previniendo enfermedades de tipo metabólicas y cardiovasculares.

No te pongas excusas, no importa lo ocupado que estas, siempre habrá tiempo para ejercitarte. La edad tampoco es limitante, hay rutinas que se adaptan a todas las edades, enfermedades y lesiones.

Lo único que necesitas para combatir el dolor de espalda en la cama mediante el ejercicio es voluntad y disciplina.